Conjugación

Yo                Dios
Tú                Dios
Él                 Dios
Nosotros        Dios
Vosotros        Dios
Ellos              Dios

-------------------------
Amen.-

Mi recordar

Es la acumulación de la negrura más grande que existe.
La raíz de todos los males, el querer tentar a la bella muerte.

Un cielo ni lejano ni alto, sino entre nosotros. Aquí, contigo, conmigo.
Y surge como un volcán de flores color azabache, es un sol siniestro a media noche, es no querer ni ahora ni cuándo. Vos no sé si sabés a lo que me refiero, y tal vez en el fondo no me interese que lo sepas. Vos debés saber bien que los laberintos ajenos por algo son tales, con sus pasadizos particulares y algunos incluso con abismos en la vuelta menos esperada, pero que también no son del todo laberintos, y que en algún momento (también en el menos esperado) puedes encontrar algún día el recorrido correcto que te lleve a un buen lugar o a la salida. Eso puede que no dependa ni de ti ni de mí exclusivamente, ni de la renombrada suerte a la cual muchos idolatran. Para mí es azar y voluntas. Aunque también debés saber que tal vez jamás logrés comprender, a pesar de que el esmero sea sinfín.

Pero ese alquitrán hirviente en medio del camino es sobrepasable. Y eso sí que depende de ti, de mí, de ellos. Es ese no recordar constante, ese vacío ante mis ojos. Es ese no saber lo que se sabe, porque simplemente no se recuerda. Eso puede ser un alivio, pero la mayor parte de los tiempos es una tristeza inexplicable, porque sabés que hay algo, pero no podés recordar qué. Una falta de contenido angustiante.

Es la negrura más grande y silenciosa que existe...

Amén con Amen.-